Eráse una vez Catatonia y La Hispaniola y una ficción que tiene a Villarejas como protagonista

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Un circo y un ciudadano ejemplar en una comisión de servicios

Eráse una vez un ex-comisario de policia que entra y sale como Pedro Sánchez por su casa, mejor puntualizar de su celda de mentirijilla podría decirse, al que se le encargó la misión de desbaratar y desacreditar el movimiento independentista catatonio.

Villarejas, que así se llama nuestro héroe anónimo y antagónico para otros, se inspiró en el film “Un ciudadano ejemplar”, una cinta protagonizada por el escocés Gerard James Butler, no del todo secesionista que respiró profundamente cuando la consulta en su autonomía “británica” fracasó y quedó como un ejemplo de saber estar en el reino de su majestad.

Villarejas al igual que el actor, una vez apresado voluntariamente, había excavado previamente un túnel que le conducía a un edificio vecino de la prisión del que era propietario, lo que le permitía, en el caso del empresario detenido en la película, salir por las noches para realizar su venganza contra quienes violaron y mataron a su esposa y a su hija.

Villarejas tomó debida nota y eligió Estremera, un penal en donde cohabitan algunos de los siete impulsores cerebrales de un proceso ambigüo de separación de bienes, a fin de prestar sus servicios mercenarios como doble agente con licencia para todo, y así poder manipular y dinamitar los proyectos que en los largos paseos por el patio se idearon para lograr el éxito de separar Catantonia de La Hispaniola.

Lo que no sabía nadie es que a través del pasadizo secreto le visitaban los cabecillas de su red inteligente para recibir instrucciones directas en su vigilada y comodísima celda, en la que Villarejas es el “rey de bastos” con dotes de mando para hacer y deshacer todo lo que se le antoje de arriba a abajo.

Y así, poco a poco, 25 jóvenes samurais concienciados unionistas, todos parlantes del idioma extraño del “ pa amb tomàquet “, empezaron a armarla gorda, introduciéndose en puestos clave, influyendo y arengando a los comités de defensa de la supuesta y ansiada república, a la que aspiraban los cada vez más numerosos alumnos de EGB y universitarios que creían que lo principal de la aventura en vez de estudiar, era salir a adosar pegatinas de rebelión, dar patadas a las vallas y lanzar pinturas multicolores al estilo de la “india ex-colonizada”, además de enfrentarse a unos mozos autoritarios armados con porras y escopetas lanza pelotas, provocado el caos suficiente para que el verdadero gobierno con el poder en la sombra tuviese una coartada legal y así poder en un momento dado, tomar la sartén por el mango y hacer intervenir a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, sin descartar al ejército y a su élite de choque, que sin duda es una legión de hombres caracterizados por llevar un gorrito que conocen por “chapiri” y abierta la camisa desabrochada hasta el último botón, sacando pecho y corriendo a ciento sesenta pasos por minuto.

A todo lo manifestado, uno de los hijos de perra de clausura, esposa del principal instigador de la trama con apellido de una marca de ron, díose cuenta del terrible error y quiso como mensajero pactar con Villarejas, quien le confirmó que ahora era demasiado tarde para evitar la venganza y humillación de quienes se han sentido traicionados, decepcionados por no haber seguido el conspirador la regla basada en la “omertá”( ley del silencio ), tener pavor a ser traicionados por los suyos, miedo a ser juzgados por corrupción y querer apropiarse de los yacimientos descubiertos de un crudo que muy pronto fluirá del mar Mediteráneo, para calmar y paliar la deuda pública que los fondos de inversión ya no pueden seguir sufragando, para un país sin control y en franca decadencia que puede producir un crack en la nueva recesión que se espera.

Villarejas sabe que cuánto más tiempo gane con la irrisoria sublevación de una parte significativa de los “catantonios” embrujados y engañados, le va a ser difícil mover ficha para congelar la situación, y que el aumento de presidentes a dedo de la discordia si no se arregla ésto, alguno huído y afortunado de no caerse por las escaleras de un “parlament” inapropiado, cobarde, caótico al que le molestaría perder el salario del miedo y la bancada de una protección institucional, y otro tipo de cínica sonrisa, que le ha sucedido como máxima figura con más ceguera y aspiración a convertirse en el payaso de una hipótetica transición, pueden en cierta manera convertirse en un obstáculo para lograr un final feliz y no airear al paciente húngaro israelí que juega a dos bandas y con el que hay que entenderse si o sí, para que la industria de la extracción y la refineria tenga un nuevo punto de interés para un mundo que se desploma, que va a necesitar además de plantas de ciclo combinado, mucha electricidad para la industria del automóvil, además de carburante sobrante para equilibrar las economias y dejar de enriquecer a los que por jugar dilapidan tesoros y se comportan como dioses terroristas con sed de hacer daño y aspiraciones obsesivas a recuperar tierras que un día perdieron por el avance de la cristiandad, algo que no dejaría de ser una amenaza para los propietarios del Monte de la Tentación o el mismo Sinaí.

Villarejas es un inteligente patriota y no se corta un pelo cuando discute con sus homólogos ya sea de dentro o de fuera, fascinándole las artes que aplican profesionalmente los mejores recogedores de información del mundo y letales de ser necesario, los activos y los durmientes, de los que de alguna forma increíble ha llegado hasta ellos sin despertar la más mínima sospecha, quizás por el principio básico de negociar con los supremos no errar al tirar y abatir a las palomas, que un día le pueden ayudar a ser un referente en la historia oculta que hoy le trata tan mal, sabiendo que no habrá medalla alguna al final de su contienda.

Vilarejas tiene una idea muy retorcida y espeluznante si algo se tuerce en Catantonia, siempre le queda el recurso de introducir a algunos seleccionados bestias de los doce mil legionarios como grupo de asalto de paisano y desarmado, para liarse a mamporros desafortunados con unos críos que no quieran regresar a las aulas y seguir siendo los cancerberos endemomiados por el virus de la ignorancia y una marihuana barata que no hallan en las escuelas, unos niñatos que a la primera de cambio llorarán cuando vean sus dientes rodar por la Via Láctea y sus banderas convertidas en trapos para taponar heridas, sin una estrella que jamás será reconocida si al divino Villarejas no le da un infarto, aunque sustitutos los hay y muy preparados, muchos con alta graduación y competentes que probablemente se encuentren en países de habla hispana con situaciones complicadas, admiradores de  quienes como el citado siempre ha hecho de su capa un sayo. 

Villarejas es como dijo un exjuez despechado de cabello lacio y blanco, ahora abogado indignado.. “ un mal necesario “.

Y esa es la tragedía y el lamento de los “tirios” y “troyanos” de una guerra sucia que empezó cuando después de treinta años de sumisión fingida, el viejo virrey que presumió de ser la bisagra de La Hispaniola, decidió seguir cobrando su 3 % familiar y una parte para el partido dominante, a la vez que negociaba y obtenía aparentemente el perdón injustificado de sus fechorías, corruptelas y tropelías, mientras descubría el cercano oro líquido, proponiendo un armisticio, tener la boca bajo candado y un indulto para todos sus vastágos.

Villarejas es un topo y peligroso, un ser despreciado por muchos, alabado por quienes tienen la capacidad de tirar de los hilos cuando quieran y un monstruo para sus enemigos, nunca acérrimos pues le tienen más miedo que a un lobo solitario, hambriento y sediento de sangre y hiel, cuando le impiden tirar personalmente de gatillo en el circo de las fieras y le hacen respetar los compromisos en el zoo de una sociedad desvalida, vendida y sacrificada a los intereses de unas sombras demasiado oscuras, que mejor no iluminarlas para seguir contando historias para lectores invisibles y solitarios.


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Comentarios

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1 Comment

  1. Completamente de acuerdo.

    Vivimos en un País de chiste y pandereta, donde cada vez más, se nos manipula al antojo de los que se hacen llamar LIDERES DEL PAIS!!!, cuando realmente, no mandan ni en sus casas…

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